Vitamina K2: su papel clave en la calcificación arterial

La salud cardiovascular depende en gran medida del equilibrio entre la correcta mineralización de los huesos y la prevención de la acumulación de calcio en las arterias. En este proceso, la vitamina K2 desempeña un papel esencial, aunque a menudo pasa desapercibida frente a otros nutrientes más conocidos como el calcio o la vitamina D. Sin embargo, la evidencia científica demuestra que esta vitamina actúa como un regulador fundamental del metabolismo del calcio, evitando su depósito en los vasos sanguíneos y protegiendo así la función arterial.

Qué es la vitamina K2

La vitamina K pertenece a un grupo de compuestos liposolubles que participan en la coagulación sanguínea y en el metabolismo óseo. Se divide en dos tipos principales:

  • Vitamina K1 (filoquinona): presente principalmente en verduras de hoja verde.
  • Vitamina K2 (menaquinona): producida por bacterias intestinales y presente en alimentos fermentados y de origen animal.

La K2 es la forma que interviene de manera más directa en la regulación del calcio y en la protección frente a la calcificación arterial.

Mecanismo de acción en la calcificación arterial

La vitamina K2 activa dos proteínas clave:

  1. Osteocalcina: encargada de fijar el calcio en el tejido óseo, fortaleciendo los huesos.
  2. Matrix Gla Protein (MGP): evita que el calcio se deposite en las arterias y tejidos blandos.

Cuando hay deficiencia de vitamina K2, estas proteínas permanecen inactivas, lo que puede favorecer la rigidez arterial y el desarrollo de enfermedades cardiovasculares.

Evidencia científica

Diversos estudios epidemiológicos y clínicos han demostrado una relación inversa entre el consumo de vitamina K2 y el riesgo de calcificación arterial, enfermedad coronaria e infarto.

  • Investigaciones realizadas en los Países Bajos (Estudio de Rotterdam) encontraron que una ingesta elevada de vitamina K2 se asocia con menor riesgo de mortalidad cardiovascular.
  • Otros estudios han confirmado que la K2 puede reducir la progresión de la calcificación arterial en personas con alto riesgo cardiovascular o enfermedad renal crónica.

Fuentes naturales de vitamina K2

La vitamina K2 se encuentra en alimentos fermentados y en productos animales de pastoreo. Las principales fuentes son:

  • Natto (soja fermentada japonesa): la fuente más rica en menaquinona-7 (MK-7).
  • Quesos curados: especialmente los de fermentación natural.
  • Huevos de gallinas camperas.
  • Hígado y carnes de animales alimentados con pasto.
  • Mantequilla y lácteos enteros de vacas de pastoreo.

La menaquinona-7 (MK-7) es la forma más biodisponible y con vida media más prolongada en el organismo, lo que la convierte en la más efectiva para la salud vascular.

Sinergia con la vitamina D

La vitamina D favorece la absorción de calcio, mientras que la K2 se encarga de dirigirlo hacia los huesos y evitar su acumulación en arterias.

El equilibrio entre ambas vitaminas es fundamental: una suplementación con vitamina D sin suficiente K2 puede incrementar el riesgo de calcificación vascular.

Recomendaciones prácticas

  • Incluir alimentos fermentados y de origen natural en la dieta.
  • Priorizar productos animales de pastoreo frente a los industriales.
  • En caso de suplementación con vitamina D, valorar la inclusión de vitamina K2 (preferiblemente en forma de MK-7) bajo supervisión profesional.
  • Mantener una dieta equilibrada y rica en antioxidantes para potenciar la salud arterial.

Conclusión

La vitamina K2 desempeña un papel esencial en la prevención de la calcificación arterial al dirigir el calcio hacia donde debe estar: en los huesos, no en las arterias. Su acción coordinada con la vitamina D y otros micronutrientes convierte a la K2 en un componente clave de la salud cardiovascular. Incorporar alimentos ricos en esta vitamina o mantener niveles adecuados mediante una dieta equilibrada puede ser una estrategia efectiva para proteger el corazón y preservar la flexibilidad arterial a largo plazo.

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