Cloración salina. Cuanta sal echar a la piscina

Introducción

El mantenimiento adecuado de una piscina incluye la correcta medición y adición de sal para asegurar una desinfección eficiente. En este artículo, exploraremos cómo medir la cantidad de sal necesaria en una piscina, cómo añadir la cantidad correcta y por qué es importante mantener la concentración de sal dentro de los valores recomendados.

La Importancia de la Sal en la Piscina

La sal, específicamente el cloruro sódico (ClNa), es esencial para el proceso de desinfección en las piscinas que utilizan un clorador salino. Cuando el cloruro sódico se disuelve en el agua y pasa por una célula electrolítica, se genera cloro gas (Cl2). Este cloro gas, a su vez, se convierte en ácido hipocloroso (HClO), el agente desinfectante que mantiene el agua de la piscina libre de bacterias y otros patógenos.

Valores Recomendados de Sal

La concentración de sal recomendada en una piscina que utiliza un clorador salino suele estar entre 4 y 6 gramos por litro de agua, o lo que es lo mismo, entre 4 y 6 kilogramos por metro cúbico. Algunas configuraciones de cloradores pueden requerir concentraciones más altas, pero estas son menos comunes y suelen utilizarse en piscinas con agua marina.

Cómo Medir la Sal en la Piscina

Para medir la concentración de sal en la piscina, se pueden utilizar tiras analíticas. Estas tiras son fáciles de usar y proporcionan una lectura precisa de la cantidad de sal presente en el agua. El proceso es sencillo:

1. Sumergir la tira en una muestra de agua de la piscina.
2. Esperar unos 10 minutos para que la tira absorba el agua.
3. Comparar el cambio de color en la tira con una tabla de referencia proporcionada por el fabricante de las tiras.

Por ejemplo, si después de 10 minutos la tira muestra una lectura de 7.2, esto equivaldría a 3.880 miligramos por litro, o aproximadamente 3.9 kilogramos por metro cúbico.

Ajuste de la Concentración de Sal

Si la medición muestra que la concentración de sal es inferior a la recomendada, es necesario añadir la cantidad adecuada de sal para alcanzar los niveles óptimos. El cálculo es simple:

1. Determinar la diferencia entre la concentración actual y la concentración deseada.
2. Multiplicar esta diferencia por el volumen de la piscina.

Por ejemplo, si la concentración actual es de 2 gramos por litro y se desea alcanzar 5 gramos por litro en una piscina de 50 metros cúbicos, se necesitan 3 gramos adicionales por litro. Esto se traduce en 3 kilogramos por metro cúbico, lo que resulta en 150 kilogramos de sal necesarios para alcanzar la concentración deseada.

¿Se le puede echar cloro a una piscina salina?

Sí, se puede usar cloro en una piscina salina para ayudar a aclarar el agua y eliminar cualquier problema de turbidez. Las piscinas salinas generan cloro a través de un clorador salino, pero en ciertas situaciones, como cuando hay un alto nivel de contaminación o algas, puede ser necesario agregar cloro directamente para una desinfección más rápida y efectiva.

Sin embargo, es importante seguir algunas recomendaciones:

1. Cantidad adecuada: Asegúrate de no exceder la cantidad recomendada de cloro, ya que un exceso puede dañar el equipo de la piscina y afectar negativamente la calidad del agua.
2. Medir niveles: Antes de agregar cloro, mide los niveles actuales de cloro en la piscina para evitar una sobredosificación.
3. Circulación del agua: Asegúrate de que el sistema de filtración esté funcionando correctamente para distribuir el cloro de manera uniforme.
4. Monitorear el pH: El pH del agua puede verse afectado por la adición de cloro, por lo que es recomendable monitorearlo y ajustarlo si es necesario.

Agregar cloro puede ser una solución temporal para aclarar el agua rápidamente, pero es importante también identificar y corregir la causa subyacente de la turbidez.

¿Qué es mejor usar cloro rápido o cloro lento?

La elección entre usar cloro rápido (dicloro) y cloro lento (tricloro) depende de la situación específica de tu piscina y tus necesidades de mantenimiento. Aquí tienes una comparación de ambos:

Cloro Rápido (Dicloro)

Ventajas:

• Acción inmediata: Se disuelve rápidamente y comienza a actuar casi de inmediato, ideal para choques de cloro o para solucionar problemas repentinos como la aparición de algas o turbidez.
• No afecta tanto el pH: Tiende a ser más neutro en comparación con el cloro lento, por lo que es menos probable que altere significativamente el equilibrio del pH del agua.

Desventajas:

• Duración corta: Debido a su rápida disolución, su efecto se desvanece más rápido, lo que significa que necesitarás agregarlo con mayor frecuencia.
• Uso puntual: Generalmente se utiliza en situaciones de emergencia o para tratamientos de choque, no es ideal para el mantenimiento diario a largo plazo.

Cloro Lento (Tricloro)

Ventajas:

• Liberación gradual: Se disuelve lentamente, proporcionando una liberación continua de cloro, ideal para el mantenimiento regular de la piscina.
• Conveniencia: Menos trabajo de mantenimiento diario ya que se puede agregar una vez y durará varios días o incluso semanas, dependiendo del tipo y la cantidad.

Desventajas:

• Aumenta el ácido cianúrico: Puede incrementar los niveles de ácido cianúrico (estabilizador) en el agua con el tiempo, lo que puede requerir diluir el agua de la piscina eventualmente.
• Puede afectar el pH: Tiende a ser más ácido, lo que puede bajar el pH del agua, requiriendo ajustes regulares del balance químico.

¿Cuál es mejor para tu situación?

• Para tratamientos de choque o problemas urgentes: El cloro rápido es más efectivo debido a su acción inmediata.
• Para el mantenimiento regular y prolongado: El cloro lento es más conveniente y eficaz para mantener niveles constantes de desinfección en la piscina.

En general, una combinación de ambos tipos puede ser la mejor estrategia: usa cloro rápido para solucionar problemas puntuales y cloro lento para el mantenimiento diario.

Conclusión

Mantener la concentración adecuada de sal en una piscina es crucial para asegurar una desinfección efectiva y un ambiente seguro para los nadadores. Medir y ajustar correctamente la sal no solo mejora la eficiencia del clorador salino, sino que también prolonga la vida útil del equipo y mantiene el agua limpia y saludable. Con las herramientas y conocimientos adecuados, cualquier propietario de piscina puede convertirse en un experto en el mantenimiento de su piscina.